A pesar de lo retador que puede ser la nueva normalidad y la crisis que ha dejado la pandemia por COVID-19, los emprendedores han sido ejemplo de resiliencia, tenacidad, perseverancia y los mexicanos no son la excepción.
En el marco del el Día Mundial del Emprendimiento, el cual se celebra cada 16 de abril, “los emprendedores no sólo están cambiando al mundo, también son el engranaje principal que mueve la economía y promueve la generación de empleos, los cuales son prioritarios para impulsar la recuperación económica”, afirma Jorge Corral, director ejecutivo de la Asociación de Emprendedores de México (ASEM).
En México, el 72% de los empleos provienen de pequeñas y medianas empresas (Pymes), la cuales tiene como cabeza a un emprendedor, según la Secretaría de Economía. A nivel mundial, datos de la Organización Mundial de Comercio (OMC) señalan que la micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) “son la columna vertebral de muchas economías; representan el 95% del total de empresas de todo el mundo y generan el 60% del empleo”.
En la nueva normalidad, la digitalización de las empresas juega un rol clave, ya que la adopción de nuevas herramientas tecnológicas para eficientar y automatizar los procesos han permitido a los negocios seguir operando a pesar de las restricciones sanitarias.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) señala que, de enero a septiembre del año pasado, la pandemia ocasionó el cierre del 20.8% de las empresas; es decir, poco más de un millón de negocios dejaron de operar; en contraste, durante el mismo período nacieron más de 619 mil.
Al respecto, Corral refiere que, con base en estimaciones del Banco de México, el INEGI y algunas calificadoras a nivel internacional “sabemos que la recuperación económica se dará de forma gradual y probablemente en 2022 o hasta 2023 podamos recuperar el nivel de crecimiento previo a las medidas por el COVID”.
Por ello, señala que catalizar los procesos de digitalización es fundamental, ya que la pandemia evidenció las diferencias competitivas entre las empresas digitalizadas y quienes no lo están. “Desde la ASEM tenemos un compromiso muy importante en colaboración con aliados como WhatsApp, Facebook y Akky para poder promover el aumento de las ventas y el posicionamiento de las empresas”, indica el director ejecutivo de la ASEM.
Por otra parte, muchas empresas tuvieron que disminuir su plantilla laboral o recortar los salarios de sus colaboradores, “por lo que en la ASEM apostamos a que la recuperación económica vaya acompañada de la capacidad operativa de las empresas, no sólo de la digitalización, sino que recuperen su capacidad de gestión para que puedan seguir ofertando sus productos y servicios como lo hacían anteriormente”, agrega Corral.
Una mirada al emprendimiento en México
La ASEM lanzó hace unos meses la primera Radiografía del Emprendimiento en México, documento que recaba información sobre el emprendimiento a nivel nacional. Este primer esfuerzo por mapear las necesidades, intereses y características de los emprendedores “es una guía que nos permite como asociación saber de qué partimos y hacia dónde debemos ir para impulsar el crecimiento de las empresas”, añade Corral.
De acuerdo con la Radiografía estos son algunos datos de los emprendimientos mexicanos:
- El 35% de los emprendedores tienen entre 26 y 35 años
- El 61% son hombres y el 39% mujeres
- El 80% de las Pymes factura menos de 2 millones al año
- El 74% tiene entre 1 y 5 colaboradores
- El 45% vende servicios, el 25% productos y el 30% productos y servicios
- El 40% se fundó por dos socios
El estudio también aborda las motivaciones que llevaron a los emprendedores a arrancar sus proyectos, entre las que destacan: crecimiento personal y profesional, solucionar un problema del mercado o ambiente, encontrar una oportunidad rentable, incrementar su nivel de ingresos, desarrollar un producto o servicio y dejar de tener un jefe.
Sin miedo al fracaso
En un país donde sólo el 25% de las Pymes sobreviven los dos primeros años, según el INEGI, la ASEM considera como un punto prioritario recabar información de viva voz sobre las razones por las cuales los emprendedores fracasan. Al respecto, la asociación encontró que la falta de conocimiento en el mercado, la mala administración del negocio y los problemas con los socios, son las principales razones. Además el acceso a financiamiento también influye, ya que el 90% de los emprendimientos se financian con recursos del emprendedor, al menos los tres primeros años de vida.
Entre los factores que más dificultan el emprendimiento están las alternativas de financiamiento, atraso en el pago de los clientes, la estructura tributaria, la falta de preparación y la burocracia. Ante ello, la ASEM contempla una serie de acciones y programas para este 2021 que contemplan las siguientes propuestas:
- Impulsar la Ley de Pago a 30 días.
- Simplificar la constitución de otras sociedades mercantiles.
- Proponer un régimen fiscal más adecuado para las empresas y que promueva el paso a la formalidad.
- Optimizar la política migratoria para empresas y emprendedores extranjeros
- Agilizar la evaluación y resolución de los procesos de concentración en los que participan las startups en México.
- Promover un régimen especial para reconocer a los emprendimientos de triple impacto (económico, social y ambiental), conocidas como Beneficio e Interés Colectivo (BIC).
La ASEM señala que tiene un compromiso permanente con el emprendimiento en México, por lo cual cuenta con las colaboraciones de aliados estratégicos para brindar programas, mentorías y capacitación en diversos temas como ventas, finanzas, marketing digital y fiscalización, entre otros.