En México se han dado pasos agigantados en la dirección correcta para que el modelo del open Baking tenga mayor impacto y genere mayores beneficios.
En México y el Mundo, el movimiento del Open Banking representa una gran oportunidad para que las instituciones financieras evolucionen y pongan al centro las necesidades y experiencias de los usuarios.
De acuerdo con el estudio hacía el Open Baking en México se destacó, que el 90% de los ejecutivos encuestados considera que la banca abierta representa una gran oportunidad para sus empresas, el 72% considera que fomentará el desarrollo de mejores servicios digitales, el 68% considera que fomentará el crecimiento de las empresas financieras y el 65% considera que generará una competencia positiva en la industria.
El impacto de la banca abierta ya se refleja en la industria mexicana y en México existen 512 startups con soluciones financieras digitales, lo cual representa un incremento de 16% con respecto a 2020, de acuerdo con el Radar Fintech e Incumbentes 2021 de Finnovista.
Por otro lado el cambio del modelo clásico del sector financiero a Open Banking a demostrado que promueve la competitividad, lo que resalta en el diseño y desarrollo de productos y servicios para diferentes grupos poblacionales y, a la postre, una mayor inclusión financiera.
Finalmente la falta de infraestructura y la brecha digital que aún persiste en México, sobre todo en poblaciones rurales, son dos de los factores que más dificultan el desarrollo del Open Banking en el país.
“El modelo de banca abierta necesita de la buena voluntad y la planeación estratégica de la industria financiera en su conjunto, de manera colaborativa. El Open Banking ha dado pasos enormes para su consolidación en México, pero todavía se encuentra lejos de su potencial total”, señala Nick Grassi.