Los procesos, las aulas, capacitaciones y clases dieron un giro de 360 grados. A partir de la pandemia de Covid-19, la vida universitaria experimentó una transformación completa.
Con este panorama, un estudiante de nuevo ingreso pudiera encontrar abrumador el ritmo de vida universitario. Incluso, muchos ingresan sin una guía clara; hasta un 86% dice no conocer a algún egresado de su área que pudiera contarles cómo es la vida laboral en su profesión.
Por eso, Andrea Valenzuela Rivas, Rectora de la Universidad Latinoamericana (ULA), enumera cinco puntos esenciales para sacarle el máximo provecho a esta etapa educativa.
“La vida universitaria es muy cambiante, llena de retos y de satisfacciones personales también. Creo que podemos tomar todo lo aprendido durante este periodo de innovación y seguir transformando la vida de nuestros alumnos”, comenta.
Sin embargo, según estudios del Instituto de Investigación en Psicología Clínica y Social (IIPCS), y Vocación Central, hasta un 40% de los jóvenes en México considera que se equivocó al elegir su carrera universitaria. Además, durante el primer año de estudios, un 58% de los alumnos abandona o se cambia de carrera.
La primera recomendación es disfrutar la etapa, pues sin duda es de las mejores experiencias para un Universitario.
Al respecto Andrea Valenzuela aconseja a los alumnos asegurarse de que eligieron la carrera correcta. Para ello requieren ser honestos consigo mismos y revisar si realmente el camino que ven al frente es el adecuado, y si no es así, tomar decisiones
También deben saber adaptarse a los cambios, ya que encontrarán profesores con diferentes estilos de enseñanza, todos importantes para su proceso de aprendizaje.
Organizar el tiempo da paso al cuarto tip y es un punto clave, que debe ir más allá de lo académico, a la parte personal, para construir un balance saludable entre los estudios y la vida.
Por último, Valenzuela considera que la motivación es esencial para sortear los retos diarios e integrarse de pleno a la vida universitaria. En este sentido, las universidades deben proveer a los alumnos de experiencias que complementen sus clases.
“Podrán mantenerse motivados si participan en actividades culturales, deportivas, internacionales y todo lo que se les ofrece para complementar sus estudios y mantener su balance”, concluye.