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EL T-MEC Y EL TLCUEM, EL POSIBLE SALVAVIDAS PARA LA ECONOMÍA DE MÉXICO

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Por: Sofía Koehler, Vicepresidenta de Grupo Colquímica.

Tanto el T-MEC como el TLCUEM ofrecen a México una gran oportunidad: ese as en la manga para frenar la caída del PIB del 8.5% según el INEGI. El acceso a dos mercados tan sumamente grandes e importante, los beneficios arancelarios, la envidiable posición geográfica de México entre el norte y el sur del continente, así como poder acceder a mercados de 328 y 446 millones de personas respectivamente con notable poder adquisitivo, puede suponer para México un salvavidas a tener a mano.

En este sentido y aprovechando la apertura al mercado mexicano por partida doble, desde el punto de vista de la empresa europea que es Colquimica, ahora que acabamos de inaugurar una fábrica en Charlotte (EUA), podemos acceder al mercado mexicano tanto a través de las ventajas que ponen a nuestra disposición el T-MEC como las del TLCUEM. Esto nos anima a ver como se presenta una interesante y viable opción de futuro, para invertir en México sea con una planta de producción y/o infraestructura de distribución para llegar a nuestros clientes de todo el país.

Las empresas europeas e internacionales que comercian dentro de la Unión Europea ven un gran mercado común donde hay grandes oportunidades y ventajas cuando tienen en frente a 27 mercados individuales sin fronteras, sin aranceles, sin limitación de movimiento de capitales entre países y sin necesidad de calcular tipos de cambio en 19 de ellos. A su vez, grandes consorcios europeos buscan en otros lugares del mundo terreno fértil para la inversión y el crecimiento, mercados comunes como el que México tiene con el T-MEC.

Pero, como empresas europea y más concretamente portuguesa, para las compañías que apenas comenzaban a expandirse, que empiezan a ver sus marcas en el nuevo continente o en cualquier otra parte del mundo era, como decimos en Portugal, coisas do arco da velha, o simplemente una fantasía. Sin embargo, la realidad ha cambiado por completo y ahora empresas con suficiente capital pueden buscar oportunidades para hacer crecer su negocio más allá de los límites de la UE. Los tratados comerciales abren caminos y oportunidades a empresas de todo el mundo para competir en nuevos mercados, mientras se aporta de manera significativa al crecimiento económico de la región. 

De acuerdo con la Cámara de Comercio e Industria Luso-Mexicana y BANXICO, el comercio entre México y Portugal casi se duplicó en cuatro años, al pasar de 550 millones de dólares en 2014, a 853 millones en 2018. Un año después, en 2019, nuestro comercio seguía fortaleciéndose hasta que la pandemia cobró la factura en 2020, regresando a los niveles de comercio del año 2013, rondando los 480 millones de dólares.

Si bien las cifras no son tan abultadas como las de Estados Unidos, Canadá y China, los tres principales socios comerciales de México, después de haber visto un fuerte crecimiento comercial entre México y Portugal, sabemos que ambas economías pueden recobrar fuerza y aprovechar las buenas relaciones diplomáticas que existen entre ambos países para reactivar las exportaciones e importaciones. No podemos olvidar por supuesto, que el Tratado de Libre Comercio entre México y la Unión Europea (TLCUEM), firmado el 23 de marzo del 2000, en Lisboa, tiene un valor comercial de 75,500 millones de dólares en 2019 y que se actualizó y modernizó el 28 de abril de 2020. 

El proceso de modernización del acuerdo global con la Unión Europea, así como el recién Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá, aunado al sólido marco jurídico que rige las relaciones bilaterales, torna especialmente atractiva la participación del sector privado, favoreciendo los intercambios de productos y servicios de alta calidad, y el incremento de la inversión en sectores estratégicos para el desarrollo de toda la región.

Al igual que nosotros hemos entendido que el mercado americano es una gran oportunidad para nuestra empresa, para crecer y expandirnos más allá de Europa, las empresas mexicanas deben mirar hacia Europa como un mercado de oportunidades, un mercado donde crecer y un mercado de futuro.